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lunes, 30 de mayo de 2011

Una esposa modelo y actriz de ocasión. © ( 2a Pte. Cap.6 )

Una Esposa Modelo y Actriz de Ocasión . ©

Adaptación *  Ludo Mentis , Jordy Notebook y G. O. Tigers.
*(Adaptación de un Viejo Relato contado hace tiempo por el gato de Chezshire ® . Recientemente encontrado entre los archivos de la PC )


6º Capítulo

2ª Pte Cap 6 ( Encubriendo el Adulterio ) * ©
Ludo Mentis y G. O. Tigers El Relator

…Tengo miedo de  haber quedado embarazada‑   Desconsolada lloriqueaba Isabella al día siguiente de haber sido vilmente engañada y seducida por su habilidoso vecino.


‑ Por favor., eso no puede ocurrirme Doctora.   Mi marido no puede enterarse de nada de esto Doctora., usted lo conoce y sabe que ya no queremos mas niños.‑     Sonrojada se lamentaba entre lagrimas y gimoteos, mientras llena de temor intentaba encontrar una manera coherente de pedir su ayuda aunque sin revelarle del todo la verdad de lo sucedido.

‑Bueno si Isabella., pero antes que nada yo sigo creyendo que esto está mal y deberías de hablarlo con él , yo sé que esto es difícil pero él podrá entenderte y entre ambos decidir que hacer…‑      Insistía en recomendarle la mujer de bata blanca  antes de volver a conminarla y ofrecerse.      – No puedo creer que seas capaz de no haber llamado a la Policía.   Si tu quieres yo te acompaño a que denuncies a ese infeliz.    Es más., yo misma tengo que reportar este tipo de delitos cuando suceden…

‑ ¡No!., eso no…‑  De manera tajante le impidió continuar

La realidad que ella no sabía cómo explicarle a la Doctora, era que después de haber sido poseída por aquel aprovechado, a quien no contenta simplemente con permitirle que gozara su cuerpo y hacerla gemir como loca al derramar dentro de ella toda la carga de potentes y briosos espermatozoides que había producido para desfogarse dentro de su desprotegido útero.  O como no bien este la había puesto en pie para ordenarle que se vistiera y anduviera nuevamente el camino por el que había llegado hasta la sala de su residencia.  De la que como si de una cualquiera se tratara y sin siquiera molestarse en vestirse de nuevo para evitar que alguien pudiese llegar a verle, se limitó a correr sobre el riel la puerta para que saliera la ultrajada mujer hacia el jardín comunal despidiéndola con una suave aunque determinante palmada en la retaguardia de la aturdida Isabella., que mas que una nalgada a ella le pareció un vulgar apretujón sobre la palpitante carne de su habitualmente rozagante y firme trasero, más con la intención expresa de delimitar lo que aparentemente para aquel hombre era uno de sus nuevos dominios conquistados que con el afán de expresarle cualquier otra cosa., cuando Isabella, llena de pánico de que alguien pudiera llegar a verla en ese lugar y con aquel hombre prácticamente desnudo con su todavía, aunque ya mas flácido, aún tremendo aparato sexual colgando ahí delante de él, reluciendo en la penumbra a la vista de quien pudiese pasar por allí a aquellas horas de la noche, cubierto en toda su longitud por los jugos que ella misma había producido para lubricarlo durante el infame apareamiento., por lo que apresurándose a salir cuanto antes pudiera del sitio sin terminar de arreglarse del todo las ropas.

Envilecida  y sabiéndose vencida en lo más íntimo de su orgullo e ínfulas de casta mujer dedicada al amor de su marido e hijos., aun aturdida y sin poder terminar de caer en la pena de su propia vergüenza por el súbito giro de los eventos que sin ella haber podido intuirlo siquiera hacía menos de sesenta minutos o dos horas atrás, la habían conducido a convertirse en una adultera engaña maridos., de esas a las que ella tanto atacara y fueran comentadas entre sus amigas., penosamente se encaminó de vuelta a la seguridad de su casa mientras disimuladamente terminaba de acomodarse las ropas sobre su mancillado cuerpo en tanto que ya encontrándose sobre el césped recordaba ella haber intentado hallar dentro de su cabeza una explicación para lo sucedido o al menos alguna manera de disculpar su conducta.    Cuando todas sus tribulaciones se vieron interrumpidas  apenas luego de unos cuantos pasos al notar ella como para colmo de males, de repente al caminar la entrepierna de sus pantaletas comenzaba a empaparse con la viscosa y pesada sustancia depositada dentro de ella por aquel tipo, amenazando con desbordarse por las costuras de la  corrompida prenda que finalmente y para descontento de su dueña poco había servido para mantener a salvo todo el intachable pudor que se suponía deberían de haber protegido.


‑…¿Violada?‑  ¿Realmente podía ella  o alguien más llamar verdaderamente violación a lo sucedido?     Se repetiría ella incesantemente la pregunta durante  toda la noche después de bañarse, ducharse sus partes privadas y lavar las prendas íntimas que en tan mal estado habían vuelto a casa.  Volviendo poco mas tarde a atormentarle el recuerdo de lo sucedido entre ella y aquel hombre para complicarse todavía más tarde al ir a ver que el niño se encontrara dormido en su camita ignorante del profundo dilema por el que atravesaba su madre después de haber permitido a otro hombre distinto de su padre haberla gozado y entregado su cuerpo de la manera en que una esposa sólo debería de entregarlo a su esposo.

Así, luego de escuchar le perorata de su doctora y rehusarse a denunciar el hecho pero sin ir más lejos en sus explicaciones  aun cuando esto le suponía crear ciertas dudas en la cabeza de la galena por lo que finalmente le pidió:   ‑Lo único que quiero es evitar que mi marido se entere de lo que pasó Doctora…   No tendría como explicárselo ni  mucho menos sabría que decir o quisiera que se imaginara nada o a aquel negro encima de mí., me hiciera preguntas o tener que decirle que dejé que esto me pasara con un hombre de color.

Por lo que después de una emblemática pausa la Doctora decidió respetar los deseos de su paciente y no mortificarla mas con sus dudas y curiosidad por los misterios que esta parecía  estar decidida a no revelarle y se limitó a indicarle que le podría prescribir un contraceptivo de emergencia con el que abortaría cualquier posibilidad de haber concebido alguna criatura durante la noche anterior pero, le advirtió:    ‑ El problema es que si te lo aplico, este puede tener algunos efectos secundarios nada deseables y si acaso llegara a no surtir efecto en ti o en el posible feto y de todas maneras quedaras embarazada, el producto podría llegar a nacer con deformidades o deficiencias.

Isabella que sin duda alguna había sido educada bajo una firme moral y, hasta la noche anterior, principios inquebrantables, se encontró de pronto ante la terrible disyuntiva de sus decisiones  pero después de algunos instantes durante los que lo meditó., pensó que finalmente precisamente para eso era que había decidido acudir a aquella consulta y lo último que una mujer como ella podría permitirse era la posibilidad de traer al mundo a un hijo bastardo si no concebir a un niño cuyo color de piel le resultaría imposible de explicar a su marido, sus familiares o su propio hijo cuando este creciera, por lo que decidió tomar el tratamiento.

Horas mas tarde al volver a casa, Isabella después de atender al menor y encargarlo con su hermana mayor y la niñera, desde la ventana de su habitación se asomó a mirar hacia el otro lado del residencial centrando la vista en la puerta de cristal de aquel aprovechado, sin notar nada en esta que delatara lo ocurrido a su honra la noche previa, por lo que desconsolada al sentir que aquel tendría que ser uno de sus  más oscuros secretos comenzó a lagrimear y decidió recostarse sobre el lecho que compartía con su marido para abrazarse a su almohada y lanzarse a llorar.

Lloraba por lo sucedido, por su marido y su hijo que no se merecían nada de lo sucedida entre ella y aquel hombre.  Llorando también por no saber qué era lo que ella había hecho mal para llegar a traicionar de aquella manera todo su amor, la confianza y sus votos de fidelidad.   Pero por encima de todo terminó de volverse un mar de lagrimas cuando de pronto volvió a su cabeza la manera en que ella había dejado que aquel hombre tomara el control sobre su cuerpo.

No importaba cuanto odiara a aquel abusivo y la manera tan impune en que la había tocado,  en el fondo de su ser, sabía que algo había sucedido en su interior que secretamente le había causado un extraño placer que nunca hasta ayer siquiera  había ella supuesto ser capaz de gustar  cuando él sin contemplación alguna se hizo cargo de ella para hacerla gozar y explotar de una forma en que no recordaba haber experimentado jamás con David o ninguna otra persona antes  que él.

Así pasó buena parte de la tarde, intentando dilucidar una forma de lidiar con sus remordimientos y pesar cuando de pronto timbró el teléfono sobre el buró del lado de la cama.

… ¿Pero cómo que ya me vas a dejar plantada y que no irás? ., ¿ que hay de la obra y las clases  Isa?...‑   Del otro lado del aparato vino el reclamo de su cuñada luego de que Isabella le dijera que tenía pensado no asistir más a la clase ni participar en el proyecto.

‑No puedes renunciar!., ¿ fue algo que te dijo David?....  Si quieres  yo le digo que no venga con sus celos o patrañas de macho en celo …‑   Se ofreció ella a mediar sin saber la realidad de las cosas que en ese momento pasaban por la cabeza de la atribulada Isabella.

‑No Ale., no es él ni nada de eso o que te imagines…‑   Se apresuró a contestar ella para evitar que se formaran en la cabeza de su pariente ideas que tan sólo complicaran mas la situación.  Y en seguida intentó aclarar.  –  David no tiene nada que ver en esto y en realidad créeme que yo si quisiera seguir yendo contigo pero surgió algo que ni él ni tú pueden saber y será mejor que me hagas el favor de no decirle nada a tu hermano por favor te lo pido.

‑No me digas que se le molesta la idea o se puso celoso …‑   Insistió en saber Alejandra., ante lo que Isabella pensó que quizás esa fuera la mejor manera de  hacer que su cuñada desistiera y la dejara tranquila.

‑No, no es eso precisamente Ale, pero  no creo poder continuar con eso, sin que de alguna manera todo el asunto este absurdo de la actuación llegara a poner en peligro mi matrimonio con David...‑     Explicó y enseguida movida por un estado conciencia que se alertó al pensar en el grave peligro que su propia cuñada pudiera encontrarse,   decidió no dar por terminado el tema sin intentar antes advertirle de velada manera.   –Mira Ale, sólo te pido que tengas cuidado por que yo creo que ese señor es medio pasado de vivo y según supe se ha llegado a aprovechar de algunas de sus alumnas o actricillas que se le ofrecen…    Si quieres ve y luego nos vemos para que te platique mas o menos como es que lo sé.   Pero si te digo que lo sé de buena fuente y no creo que sea lo mejor que continúes con las clases en casa de ese señor.

Acabó de aclararle a su cuñada la desventurada ama de casa , antes de terminar la conversación con la desprevenida muchacha Luego que esta antes de despedirse le comentara :   ¡Ay tú ni que fueras una chiquita que no sabe cómo ponerles el alto a los que se quieren pasar de la raya contigo o te fuera a atacar…  No seas exagerada!...

Horas mas tarde para calmarse un poco Isabella se dispuso a mirar algo de Televisión  después de cenar con los niños y ver que se fueran a dormir, cuando de repente el teléfono anunció una llamada que Isabella pensó que seguramente sería de David que le estaría llamando desde el hotel en que se hallaba hospedado.

‑Hola Muñeca., ¿ que es eso de Alejandra diciéndome que ya no piensas venir a verme para continuar con tus clasesitas? ‑  En realidad la sobresaltó escuchar del otro lado la profunda voz de Martín en vez la de su marido.

‑Usted bien sabe lo quise decirle y el por qué ‑  De la nada tomó fuerzas la voz de Isabella para mostrarse firme al contestar. Incluso mostrando molestia ante el atrevimiento de aquel hombre para molestarla en su casa después de lo sucedido. Y en seguida añadió con mayor firmeza.    –¡No quiero volver a verlo o saber de usted ni media palabra!.   No sé que me hizo usted ayer o que me dio pero deliberadamente se aprovecho de mí y no voy a…

‑No, no creo eso en realidad preciosa‑   La interrumpió él antes de intempestivamente arrojarle el artero comentario.   – Ayer mientras te la tenía toda clavada hasta el mango y gemías como vaca, cualquiera que te viera se hubiera dado cuenta de que te gustaba tanto como a mí y no parecía que hubieras querido que dejara de cogerte nunca con mi palote piruja!!!...

‑¡No!., eso no es cierto!‑    Intentó ella hacerlo callar.

‑¿Qué no? …  Hubieras visto como te veías con las piernas abiertas y mi cosa clavada allí en medio pidiéndome que no te la sacara güilita…   Te aseguro que soñaste conmigo ‑  Soltó el aún más humillante comentario antes de que ella supiera que otra cosa decirle.

‑No , por favor cállese ya y no me moleste , Usted sabe que eso no es cierto Señor D´bora‑    Insistió en negarle la aturdida mujer antes de colgar el auricular, reconociendo para sus adentros que en el fondo todo aquello que le decía era no otra cosa sino la pura e innegable verdad.

Luego de colgar el teléfono Isabella por fin se dio cuenta de lo acelerado que se encontraba su pulso tras la irritante llamada por lo que suspiró e intento volver a calmarse sin conseguirlo, por lo que invadida por el temor y la angustia se puso a pensar nuevamente en las posibles implicaciones que todo aquello podría acarrearle.

Aquel hombre sin duda alguna pretendía volver a tener algo con ella.  Seguramente podía también cruzar por su cabeza la posibilidad de que ella hubiera podido quedar embarazada de él y  sin el menor empacho había osado tener el descaro de llamarle a su casa sin importarle que su marido o alguno de sus hijos hubiese podido contestarle al teléfono.   Por lo que resultaba casi seguro que aquella no fuera la última vez que lo intentara o incluso buscara otras maneras de hacerla volver a caer en sus garras.


Continúa...
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Ludo_mentis@msn.com                                    Ludo_mentis@yahoo.com

6 comentarios:

  1. El relato es fantástico, me ha encantado.
    Dice 2ª parte, cap 6º, donde están los anteriores?
    Gracias

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  2. Pedrito:

    Gracias por preguntar. Te comento que en estos días aparte de concluir unas escenas que tengo el "tintero cibernetico" de mi portatil, me pondré a buscar en que ´parte exacta se halla este relato, para así intentar concluirlo y postear.

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    1. Hola Ludo: Te comento que sigo leyendo tus relatos, estoy empezando, "Asuntos de interés y negocios", y me está gustando y entreteniendo mucho, pero me gustaría comentarte algo.
      Por favor, te lo digo sin ningún ánimo de ofender, todo lo contrario, se que estáis ocupados y siempre trabajando y haciendo relatos nuevos. Empecé a leer en el blog "Ludo Mentis Relatos DSo y Arte" tu relato: "Una Esposa Modelo y Actriz de Ocasión". He visto que tiene 13 capítulos pero sólo he podido leer 4 y me ha gustado tanto que me gustaría poder leerlos todos.
      Por favor, cuando tengáis un poco de tiempo a ver si podéis publicarlos de nuevo, os aseguro que a todos los compañeros de trabajo que lo han leído les ha encantado, o sea que no te lo digo por mi sólo.
      Gracias por tu anterior contestación y espero no ocuparte mucho de tu preciado tiempo.
      1 abrazo.

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  3. muito bom relato mostrando passo a passo o puteamento de isabella.
    luiz

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  4. Genial relato! De lo mejor que se puede leer en la red...

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  5. Muchísimas gracias Oskar !!! ES todo un cumplido.

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